Quevedo, 3 de diciembre. El concejal David León Fonfay, representante del Concejo Municipal en el directorio del Quevedo Shopping Center, informó que el proceso de liquidación iniciado en esta unidad administrativa no implica el cierre del establecimiento, sino la corrección de una figura legal creada hace 14 años y que carecía de sustento jurídico.
Según explicó, la ordenanza que dio origen al centro comercial lo estableció como una “unidad administrativa con autonomía financiera y patrimonial”, una figura que no existe dentro del marco legal ecuatoriano. Por ello, señaló que el proceso de liquidación busca regularizar su naturaleza y no responde a problemas financieros.
León indicó que, al inicio de la actual administración, el centro comercial mantenía retrasos en el pago de sueldos y obligaciones con entidades como el SRI, IESS, empresas de servicios básicos y proveedores. Esta situación se habría originado por la falta de transferencia de los valores recaudados por arrendamiento, que debían ser devueltos por el GAD Municipal.
Actualmente, el shopping se encuentra al día en sus pagos, con excepción de un litigio pendiente con una empresa de seguridad heredado de administraciones anteriores.
El concejal sostuvo que, aunque existe la posibilidad de convertir la unidad en una empresa pública, esta opción no sería eficiente debido a los altos costos administrativos que implicaría. En su lugar, la propuesta es que el Quevedo Shopping Center pase a gestión directa del GAD Municipal, lo que permitiría invertir recursos del presupuesto general para su recuperación.
León informó que se proyecta una inversión de entre 200.000 y 220.000 dólares, principalmente para renovar el sistema de climatización, cuyo costo asciende a cerca de 150.000 dólares. También se prevé la intervención de canales, ventilación y otras áreas de infraestructura.
El edil aseguró que los comerciantes arrendatarios mantendrán estabilidad, ya que se han renovado sus contratos por varios años. Además, se han retirado a arrendatarios con deudas, mientras que quienes han cumplido con sus obligaciones conservarán respaldo jurídico.
De acuerdo con León, el centro comercial es sustentable y, de operar ambas plantas a plena capacidad, podría generar entre 35.000 y 40.000 dólares mensuales. No obstante, su recuperación ha sido limitada debido a deterioro estructural, falta de inversiones y una gestión administrativa deficiente en pasadas administraciones.
Actualmente, la unidad funciona con ocho trabajadores, entre ellos el liquidador, un director financiero, una secretaria y cinco operativos. Los costos de arriendo se mantienen entre 150 dólares para islas, 280 a 350 dólares para locales y valores similares para oficinas en la planta alta.
Sobre deudas pendientes, León señaló que las rentas cobradas por el GAD ya fueron transferidas, aunque aclaró que el municipio no ha reconocido cerca de 70.000 dólares correspondientes al alquiler de oficinas. Además, recordó que la ex Empresa Pública de Mercados llegó a adeudar casi 25.000 dólares antes de su extinción.
El concejal garantizó que, al pasar al GAD Municipal, los recursos destinados al centro comercial estarán protegidos, pues su ejecución deberá constar en el Plan Operativo Anual (POA). Añadió que ha solicitado un presupuesto de 250.000 dólares para completar la repotenciación del edificio.
Finalmente, León confirmó que el directorio trató este martes el proyecto de préstamo por 45 millones de dólares para modernizar las plantas de agua potable de San Camilo y San Cristóbal. El proceso fue declarado desierto por inconsistencias en la documentación, especialmente en las garantías exigidas por la normativa. Sin embargo, aseguró que, tras realizar las correcciones, el proyecto podría retomarse bajo la modalidad EPC (ingeniería, procura y construcción).
